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CARTA AL BUEN AMIGO...



Amigo te estimo, y mucho mas, más ahora, porque el camino que hemos recorrido me ha unido tanto a ti....

A través de nuestra vida juntos, han habido tantos logros, satisfacciones y hechos inolvidables, que han minimizado las cosas difíciles porque siempre juntos hemos recogido los pedazos de sueños rotos para crear nuevos., por tu paciencia, por tu comprensión,
Por el calor de tus brazos que me recuerda donde está mi refugio, mi hogar, mi pasión....

Te quiero porque me diste la libertad para que descubriera lo que más valoro en ti. Y porque me haz dado fortaleza cuando mi corazón ha estado a punto de desfallecer, y me has dado en ese momento lo que más necesitaba.... seguridad!!! Para atreverme a volar!!!!

Te estimo, por la forma en que me haces sentir.... porque tú haz sido la maravillosa persona que me haz enseñado todas las oportunidades que tiene la vida....


Cuando me preguntan acerca de nuestra amistad siempre digo que eres una persona con una magia muy especial, que derramas en cada palabra que dices, en tu forma de expresarte, y en tu exquisita forma de llegar día a día a mi vida.

Si tuviera que hablar de ti, no podría hacer otra cosa más que un retrato de tu alma, y hablar de ella es decir: que recibirte es tan bello como nutrirse de la paz que brinda los albores del alba,
Ese lugar donde uno descansa de lo cotidiano para encontrarse
con las pequeñas cosas, esas, las más simples, las que te brindan una serenidad que solo Dios con su infinita bondad y Misericordia pone en tus manos como un milagro de vida que no volverá a repetirse hasta un nuevo amanecer.

Tu amistad es mi recinto de paz donde descanso y me dejo ser.
La magia que me brinda tu presencia me hace vivir la vida de otro modo, me hace comprender que existe otra realidad mucho más bella
Detrás de cada cosa que vivo, es el tesoro de vida escondido en cada vivencia al que solo se llega si tu camino esta iluminado por una estrella polar en un cielo azul de esperanzas que solo un alma como la tuya puede albergar.

Simplemente gracias por haberme elegido, por haberme enseñado
No solo a dar sino a aprender a recibir que es lo mismo que decirte;
Gracias por ayudarme a crecer, por dejarme ser parte de tu historia,
Por enseñarme a descubrir otro mundo y en cada acto volver a nacer.

Se renace con las cosas simples que te nutren el corazón, esas que te brindan desde el afecto profundo una amistad como el que tú me das.

Gracias por estar en mi vida de esta manera tan especial!...
Gracias por estar allí… Del otro lado...

¡¡DIOS TE BENDIGA SIEMPRE!!


El esperar lo que Dios tiene guardado para nosotros puede poner una sonrisa en nuestro corazón. La esperanza nos da serenidad y nos deja vivir con una fortaleza interior, porque sabemos que un día seremos dramáticamente distintos de lo que somos

1 comentario:

Anónimo dijo...

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